viernes, 4 de febrero de 2022

Tú que siempre sabes qué decir

Pues no.
Es una expectativa
demasiado egocentrista.
Una exigencia
bastante alejada
de la supuesta solidaridad
que se espera de ti.
No. No siempre
se sabe qué decir.
Porque decir por decir,
no deja de ser
un relleno insustancial,
poco amable
y carente de profundidad.

La presión,
la losa,
la carga
de lo que se espera de ti
no es algo amigable
ni deseable.
No nace de la necesidad
transparente y humilde
de alguien que necesita ayuda.
El acompañamiento
se debe solicitar
con respeto,
pero en ningún caso
debe coger forma
de trámite.
¿dónde están las esencias?
Ya no quedan.

Tú que siempre sabes qué decir,
eres una suerte
de especie en extinción
de un planeta
que te necesita.
Pero no quiero
que te sientas exprimida,
no quiero que te cosifiquen,
sólo quiero darte la mano
y abandonar el miedo
por un momento.

Tú que siempre sabes qué decir,
es un canto desesperado
por aullentar la soledad.
Pero hay que acordarse
que una misma cosa
puede ser dicha
de mil formas
y deberíamos invertir
un tiempo en escoger
las más adecuada,
la que suponga
mayor asertividad.

Todo el mundo tiene
(o eso espero)
una persona
de la que opina
que siempre sabe qué decir.
Si es así,
ya sabes
que es uno
de tus mayores tesoros.
Blíndalo como si fuera
el contrato de tu vida
y sigue dando las gracias,
porque no cuesta nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario