jueves, 19 de septiembre de 2024

Descomunal

Suena a impresionante,
a extraordinario,
a algo positivo,
pero no necesariamente 
tiene que ser un adjetivo deseable.
Cuando algo nos parece 
fuera de lo común,
hay veces,
que no es para bien.

Cada una con sus dramas,
pero cómo duelen
los dramas de las demás.
Padecer el dolor 
de algo y alguien
que no te corresponde 
también es una tarea
fundamental 
que se esperan 
dentro de las amistades.
No con el ánimo 
de cobrar protagonismo,
sino con el objetivo 
de no parar de demostrar
una y otra vez
que no estamos solas
en este mundo.

Pero eso no calma 
ni reduce el sufrimiento.
El resultado de compartir 
algo doloroso 
favorece la visibilización 
de nuestros problemas 
y dificultades como personas,
pero la impotencia
ante la nulidad y la incapacidad 
son permeables 
a lo que nos gustaría hacer,
pero que sin embargo,
o no nos corresponde,
o solo podemos aportar escucha.

Es duro de cojones,
y más si tienes ovarios.
Y el mal de mucho 
no es que consuele 
a los tontos,
es que te pone 
en la realidad del resto 
y empatizas con sus pesares 
que nada tienen que ver
con los tuyos.
Lo descomunal
es que cada vez
seamos menos solidarias,
más absentistas emocionalmente 
y más cobardes
a nivel social.

Es descomunal 
sentir el morbo
por el sufrimiento ajeno,
es inhumano no humanizar
los lazos, no conmoverse
por las miserias,
normalizar el miedo.
Es absolutamente descomunal 
no volver a sentir certeza,
razón o cordura.
Es muy jodido no sentirse
acompañada,
no encontrar tu lugar,
no poder elegir con autonomía 
un sitio.

Me parece fuera de lo común 
todas estas mierdas
y me niego a aceptarlas 
como herencias determinadas.
Es seguro
que yo no podré hacer nada,
pero me voy a ofrecer en
cuerpo, corazón y rabia 
para que todo 
lo que habitemos
no tenga sabor a solitario.

Cómo lo siento,
cómo te comprendo 
y ¿cómo puedo estar contigo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario