viernes, 8 de abril de 2016

Mierda en las calles

De un sitio a otro
mires por donde mires
ves mierda,
mierda orgánica,
mierda intachable,
mierda de vida.
Hay que ser muy malo
para ser tan sucio.

Desechos y escoria,
parásitos viandantes
dejando caer las cosas.
Guarros,
desconsiderados,
incívicos.
Impúdicos cerdos
rodeados de mierda
íntima.
Ensuciadores profesionales
despreocupados
medioambientalmente
hablando
¡culpables!

¿Qué nos cuesta?
la miseria de
nuestras entrañas
al suelo,
perdidas al
azar del viento
que contamina
al mismo tiempo.
Restos de calles
porque ya no quedan
calles pulcras.
Lo jodemos todo
pisando donde
no debemos 
y nos da igual
porque somos dioses,
todo es nuestro
y como dioses
hacemos y deshacemos
a nuestro antojo.
Generamos mierda
y luego nos quejamos
de ella,
así somos de honestos.

Maldita la estampa
de los que ensucian
la vida,
que vuestros cristales
siempre sean opacos.

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